Drift Cars, un juego de carreras semirrealista, pone al jugador en la posición de conducir un coche de carreras en largas y sinuosas pistas al aire libre en cinco entornos naturales diurnos y nocturnos, incluyendo regiones de desierto seco, valles boscosos y montañas nevadas.
A diferencia de muchos juegos similares, el jugador está limitado en cuanto al número de mejoras que puede realizar en su vehÃculo. Inicialmente recibe un coche gris plateado con adornos azules. No pueden mejorar ninguna pieza del coche, como los frenos, el motor o los neumáticos. En lugar de ello, utilizan sus ganancias de las carreras en forma de monedas de deriva para mejorar este vehÃculo base a uno de los once modelos mejores que van desde los 3.000 dólares (coche deportivo azul de gama baja) hasta los 23.000 dólares (coche de policÃa blanco y negro de gama alta).
El objetivo principal del juego que se presenta al jugador parece bastante sencillo. Deben conducir con éxito en una pista de carreras y realizar maniobras de derrape en las curvas. Sin embargo, el juego es increÃblemente desafiante porque los controles son extremadamente sensibles. El jugador debe dominar el uso de múltiples controles para derrapar a través de las curvas sin chocar con las barreras laterales y las vallas o dar la vuelta por completo.
Los controles de su vehÃculo incluyen un volante que no se ve, frenos estándar, un freno de mano y tanques de nitro. Algunos controles también realizan dos maniobras. Por ejemplo, el jugador podrÃa hacer retroceder el vehÃculo sin control cuando frena. También puede hacer girar el vehÃculo al entrar en una curva, lo que el juego traduce automáticamente como una conducción descontrolada en la dirección opuesta. Cuando esto ocurre, aparece en la pantalla una señal de advertencia roja en forma de diamante de "dirección equivocada", y el jugador debe volver a alinear el vehÃculo.